Como algodón segado en primavera, suave y ligero como el viento que vuela,eres dueña de aquellos labios sensibles, que al verlos tan bellos se hacen temibles.
Miedo tengo al imaginar cerca, tu boca de melao que arde y me quema, si no que temo a mis demonios internos, aquella lujuria que guardo aquí dentro.
Imagino tu lengua en mi cuello, tus labios en mi pecho; pienso en el sabor de tus besos y de los suspiros eternos de nuestros cuerpos.
Me hielo, me ciego; me hago obsoleto, solo mis labios tienen pensamiento, ser uno con los tuyos; besarte sin misericordia y sin temor alguno.
¿Como algo tan pequeño puede ser objeto de tantos sentimientos? Deseo, lujuria, pasiones y anhelos, aun sin ser tocados, hacen que enloquezca al verlos.
Cada beso me mataría y otro me resucitaría, cada beso arrancaría el alma que me habita, y se iría contigo; mientras dure la visita del nudo entre tu boca y la mía.
Me pienso libre en tus labios, libre de hacer lo que desee, morder, besar, lamer ¿cuantos de tus besos me darás a beber?
Ya no quiero solo decirlo, ya no más, las palabras se las lleva el viento.
Espero el momento de volverte a mirar de tomarte con fuerza, y con pasión; tus labios probar.